Antes de empezar las clases fuera joyas. Nada de pendientes ( y menos si son largos) , anillos , cadenitas o pulseras. Lo mejor es dejarlo todo en casa y llegar a clase con los brazos , el cuello , y las orejas sin nada.
Cambiarse es una operación que debemos aprender a hacer solos , sin la atención de nuestras madres. En el vestuario suele a ver una colaboradora ( colaborador en caso de los chicos) que ayuda a los alumnos a prepararse si lo necesitan y sobre todo a peinarse.
Se deja la ropa ordenada , bien doblada para no encontrarla arrugada despues , o si hay perchas en vez de taquillas se deja curiosa en una misma percha para que los demás tengan tambien una percha donde colgar sus cosas. Cuando acaba la clase tambien hay que guardar de forma curiosa el maillot , las zapatillas , las medias , y los demás complementos en la bolsa. El vestuario es , además , un lugar donde se puede charlar y bromear con los compañeros. Pero sin levantar el tono de voz , gritar o reir a carcajadas , y sin correr o tirarse cosas. Una bailarina debe concentrarse desde el momento en el que se prepara para ir a clase o al ensayo general.
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